10 minutos
Crear historias donde eres el protagonista, momentos de paz, alegría, tiempos para conocerse.
🕠 Empieza con 10 minutos
Hay momentos en los que sentimos que no podemos más. El cuerpo se siente pesado, la mente está nublada y el alma... silenciosa. A veces no sabemos por dónde empezar, y en esos momentos, yo vuelvo a una práctica que me ha salvado más de una vez: moverme por 10 minutos.
💫 El inicio de algo pequeño que cambia todo Cuando tuve una situación de salud hace varios años, recuerdo que tenía una perrita llamada Mila. Fue mi compañera en ese periodo, en nuestras caminatas y pequeñas aventuras explorando la colonia donde vivía, llamada La Moderna, y más adelante, San Antonio de las Minas.
Recuerdo que comencé con la idea de dar la vuelta a la cuadra, como mínimo. Mi cuerpo se sentía tan débil que no quería enfocarme en lo que no podía hacer. Lloraba porque no entendía lo que sucedía. Me refugiaba en la idea de que eso era temporal y que eventualmente encontraría la respuesta. No era la primera vez que mi cuerpo no respondía, pero esta vez, lo que lo provocó fue distinto.
Recuerdo haber pensado: "No creo que sea más de 10 minutos... será rápido. ¿Qué puede pasar? Si me canso o me mareo, la gente puede ayudarme." Y me sentía segura acompañada por Mila (aunque creo que era más mi percepción que la realidad… probablemente ella estaba más traumada que yo 🐶).
Escribí una nota con mi nombre, el teléfono de mi mamá y la dirección donde estaba viviendo, preparándome siempre para lo peor. Tenía tanta prisa por regresar a Tijuana... no me interesaba Ensenada en lo absoluto.
🌳 Esos primeros pasos... Ese día caminé esa única cuadra y me puse a observar las casas. Siempre he disfrutado ver la arquitectura, los colores, los jardines… De alguna forma, el tiempo se me pasó. Mila, feliz, orinando por todas partes (todo le causaba miedo en ese entonces). Esos 10 minutos se convirtieron en media hora, y cuando menos lo pensé, ya podía subir el cerro que estaba detrás de nuestra casa sin problema.
A veces me sentaba a mirar el horizonte y, como siempre, a escuchar mi silencio. Recuerdo que lloraba, aunque no recuerdo por qué. Mila, la miedosa, dejó de serlo. Esas caminatas le hicieron bien a ella y a mí. Más de una vez fue ella quien me jaló para seguir explorando. Fue divertido. Son buenos recuerdos.
Me recuperé. Como siempre lo he hecho. Como siempre lo haré. No vale la pena tirar la toalla. No puedo darme por vencida en ninguno de los capítulos. Aún no es el tiempo de expirar.
🔄 ¿Para qué moverte?
Porque el movimiento es medicina. Y no lo digo como frase bonita —lo dicen los estudios científicos más serios... y también mi experiencia más íntima.
Moverte, aunque sea solo un poco, despierta zonas de tu cerebro que estaban apagadas por la tristeza, el estrés o la apatía.
🧠 Se ha comprobado que incluso 10 minutos de ejercicio leve aumentan:
Dopamina, que te ayuda a tener motivación y placer. Serotonina, que regula el estado de ánimo. Endorfinas, esas que alivian el dolor y nos hacen sentir paz. Y más allá de las hormonas y neurotransmisores, moverte te devuelve el poder sobre tu cuerpo, ese que a veces sentimos que ya no nos pertenece.
💔 Cuando el cuerpo se cierra por emociones no digeridas Muchas veces cargamos emociones que no pudimos procesar: enojo, tristeza, miedo, frustración... Y si no las movemos, se quedan. Se acumulan. El cuerpo empieza a doler. La mente se apaga.
Y justo ahí, es cuando más necesitamos volver al movimiento. Pero no desde la exigencia, sino desde el amor. ¿De qué sirve tratarnos con dureza, si podemos escoger un camino de paz? Sé que muchos gritan y se hablan con rigidez. No a todos nos funciona ese modelo. A mí, por ejemplo, no. Me provocaría ira… y sin dudarlo me retiraría. Mi sistema nervioso ya tiene recuerdos que está transformando. No necesito más.
Mover el cuerpo es: ✨ No tiene que ser perfecto. ✨ No tiene que verse bien. ✨ Solo tiene que reconocer que te hará bien.
⏳ ¿Solo 10 minutos? Sí. Solo 10.
Porque cuando estás bajo de energía, cuando estás triste o desconectado, pedirte una hora de ejercicio es una carga más. Pero 10 minutos... Sí se pueden. Sí los tienes. Y puede cambiar TODO.
📍 Ideas para moverte sin presión -Camina dentro de tu casa. -Súbete a la bici. -Estírate en el suelo. -Baila tu canción favorita. -Haz círculos con los brazos, salta en tu lugar, sacude el cuerpo. Recuerda que tenemos Youtube y todo podemos aprender, la disciplina se cultiva.
Hazlo con música. Hazlo en silencio. Hazlo con rabia, con lágrimas, con risa...
Hazlo.
💡 Te recomiendo investigar sobre el ejercicio somático, ayuda muchísimo al cuerpo y a las emociones.
🌱 Hoy no tienes que ser fuerte. Solo constante. Si hoy no pudiste, no pasa nada. No te castigues. Mañana será otro día.
Pero si puedes hoy, aunque sea 10 minutos... hazlo.
Y luego, si quieres, cuéntame cómo te fue. Te leo. Te abrazo. Tu cuerpo lo pide. Tu alma lo sabe.